LA VOZ DE APURE: PIONERA DE LA RADIODIFUSIÓN

Por:Hugo Arana Páez

A finales de la década de los años cuarenta del siglo veinte, los apureños estaban conscientes que al Estado Apure le faltaba una emisora de radio. Fue a mediados del año 1947, en las tertulias que se efectuaban en las partidas de domino que se realizaban en una cantina conocida como Bar El Regional (apodado coloquialmente El Chupadero) propiedad del señor Dámaso Vielma, donde se concretó la propuesta de fundar una emisora de radio en San Fernando. Por cierto, ese establecimiento estaba situado al pie de un viejo árbol de tamarindo cercano a la enorme torre del telégrafo, que precisamente le daba nombre al desaparecido puerto El Tamarindo, ubicado en el cruce de las calles Miranda y 19 de abril, exactamente donde ahora se halla la entrada del INCES.
En una de las primeras reuniones, sus promotores convienen identificar a la que sería la primera emisora de la región, con el nombre LA VOZ DE APURE en honor a la tierra que representa y casi de inmediato, acuerdan publicitar la futura radio (lo que ahora se llama eufemísticamente la preventa, ja ja ja) a través de llamativos anuncios exhibidos en la gran pantalla del Teatro Cine Royal de Don Jesús Aponte. Entre los fundadores y accionistas principales estaban: José Luis Herrera Maica, el abogado Arturo Cardozo, el farmaceuta Ramón Ignacio Rodríguez, los hermanos José y Celestino Loggiodice, Walter Michelangelli; los comerciantes José Julián Silva Fajardo, Ismael Armada, Juan Bautista Loreto, Alejo Lugo, Carmelo Rujana, Primitivo Narváez, Ángel María Aquino, Don Manuel Márquez y Ramón Orcial; el hatero Manuel Fuentes Gilí; los boticarios Don Antonio Cestari, Edmundo Mirabal y Pedro Segundo Salas; el empresario Emilio Rodríguez Saintón. Entonces esa iniciativa tuvo gran acogida entre los sanfernandinos.
Después de sortear todos los trámites burocráticos del San Fernando de entonces, al fin la emisora salió al aire un primero de enero del año 1948; siendo su primera locutora y directora Rosa (Rosita) Cestari Finamore, hija de don Antonio Cestari. Amén de dirigir esta emisora, Rosita, era Presidenta y fundadora del Ateneo de Apure y profesora de Educación Artística en el Liceo Francisco Lazo Martí, junto a otros docentes como: Vinicio Franco, Director y catedrático de Historia y Geografía Universal; José Herrera de Castellano y Literatura; Rafael Pinilla, Matemáticas; Alfredo Montoux, Inglés y Francés y Carmen Díaz Rodríguez de Biología
La incipiente radio comenzó a emitir su señal en un local de platabanda y amplio corredor (ver imágenes), propiedad de uno de los accionistas (Don José Julián Silva Fajardo), quien se lo había arrendado a los Cestari por un canon de doscientos bolívares mensuales. El slogan con que se identificaba la emisora, en la voz de Rosita, era POR EL PROGRESO DEL LLANO VENEZOLANO, TRANSMITE LA VOZ DE APURE YV-RD 920 KILOHERTZ, ONDA CORTA, AFILIADA A LA ASOCIACIÓN INTERAMERICANA DE LA RADIODIFUSIÓN AIR.

B. La Voz de Apure: Escuela de locutores, presentadores, animadores y artistas.
Por esa pionera emisora desfilaron en el oficio de animadores, presentadores y locutores, personajes como la docente Rosa Rosita Cestari, el abogado Arturo Cardozo, Rafael Emilio Osorio, Ramón Saldívar Alvarado, Don Miguel Siso, conocido popularmente como Any Quaker (un apureño autodidacta, quien fue pulpero, poeta, músico, compositor, director de orquesta, fotógrafo y locutor). Posteriormente ingresa como locutora Lida Josefina Boggio, José Antonio Castillo, Hugo Laprea Finamore, con su programa Los Pitoquitos, Luis Armas León, Douglas Ramos Osío, Antonio Boza Terán, Freddy Ibáñez Pereira, Edgar Enrique Carvallo, Jesús González Campos, Fermín Quevedo, Jesús Aragort Fuenmayor, J.B. Machado Madrid, Armando Arévalo Soto con la popular serie de aventuras Taguarí, Edgar Mendoza Torres, Wilfredo Rivero Yaro, con el maratónico programa El Gigante sin forma. En las narraciones y comentarios deportivos destacaron el filólogo Manuel Bermúdez, Rubén Darío González y después Ronald Torres. Desde sus inicios brillaron en los controles Antonio González, el radiotécnico Luis Melo y su hermana Mercedes Melo, quien inicialmente había sido secretaria de la radio.

En ese medio debutaron jóvenes apureños y apureñas entre los que descollaban Don Félix Marchena, conocido como El Trovador de la voz romántica, quien estuvo el día de la inauguración compartiendo éxitos con el invitado de honor en esa primera ocasión, Rubén Osuna, traído especialmente desde Caracas y quien en esa época era el tenor más joven y popular de Venezuela. Por cierto, Osuna debutó con los consagrados temas: En mi soledad, Me voy a alejar, Sigue siendo así y Arrepentida.

La Voz de Apure, fue semillero de artistas apureños, que se dieron a conocer en los espacios: Programa Especial, La hora de los Aficionados y el popular programa infantil Los Pitoquitos, conducido por el locutor apureño Hugo Laprea Finamore. En el espacio conocido como Programa Especial, descollaban las jóvenes como: Guillermina Sequera, conocida como La Alondra del llano, Francisca Almeida apodada Panchita y su hermana Wintila, Violeta Hernández, Carmen Sulbarán El Canario de color, Haydé Pérez, quien entonaba las canciones de la española Lola Flores y Alfredo Sadel; Haydé, interpretaba temas pegados como: Limosna de amor, Silverio Pérez y Diamante Negro. Otras que también actuaban en ese espacio eran: Carmencita Laprea, Silvia Tirado, Carmen Rivero, Doris Mota, Ofelia Baroni, bolerista que cautivó a los entendidos, Aura Sánchez, Exodia González, Elvia Soto, Luisa Ojeda, Panchita y René Pérez, Elisa Lámelas, Isabelita Aparicio, Rosa Linares, Ana Venero y Olga Farfán (hermana del trompetista Fernando Farfán, apodado Tocino) con su tema Nuestro Juramento. De igual manera descolló Carmen Lobelia Sulbarán nacida el 22-06-1937 en el barrio Perro Seco, frente al Cuartel Guaicaipuro (edificación que hasta el año 2017 funcionó como retén Judicial), quien a comienzos de la década de los años cincuenta debuta en La Voz de Apure, donde con sus magníficas interpretaciones cautivó a los apureños; asimismo se hizo famosa en el occidente y centro del país; interpretando boleros como: Cenizas (tema que tantos éxitos le daría a los cantantes aztecas Toña La Negra y Javier Solís), Palabras de mujer, Besos Brujos, Noche de Ronda, Juramento, Hipócrita, Perversa, Mala Mujer, Rayito de luna y Caminito; también interpretó música típica venezolana como nuestra Alma Llanera y Rosa Angelina; por esos éxitos, Miguel Siso y Rosita Cestari, la bautizaron con el nombre artístico El canario de color. De allí en adelante se enrumbó en busca de nuevos horizontes, debutando en otras emisoras del país, como: Radiolandia (Caracas), Ondas del Lago (Maracaibo), Ecos del Torbes (San Cristóbal), Radio Valera (Valera), Radio Libertador y Radio Girardot en Maracay. A comienzo de la década de los años sesenta iba a hacer su debut en el popular espacio de Radio Caracas Televisión dirigido por el animador Víctor Saume, El Show de las doce, cuando sufre un serio accidente de tránsito, el cual trunca su incipiente carrera.

Entre los cantantes masculinos que desfilaron por el espacio Programa especial, destacaban: Don Félix Marchena, Parmenio Guzmán, Efrén Rodríguez, interpretando canciones de Carlos Gardel y Andrés Cisneros, El Dúo del Sur, integrado por César y Pedro Rodríguez (propietarios de un taller de latonería en la esquina La Bonanza, calle Páez cruce con Queseras del Medio, donde se fabricaban lámparas de querosén, envases de latón para sacar agua de las tinajas, canales para recoger el agua de lluvias etc.), los Rodríguez hicieron historia con sus interpretaciones de los Panchos, Luisín Landáez, Alfredo Sadel y los Tres Reyes (trío colombiano de reconocida fama internacional). También actuaron personajes populares de la ciudad como: Pedro Masar, Juan Pérez (apodado cariñosamente Coquito), quien interpretaba éxitos de Daniel Santos y Lucho Gatica; Leopoldo Pérez Serrano, quien con su guitarra interpretaba temas de Olimpo Cárdenas y Julio Jaramillo; Luis Linares, quien proyectó a su hija Rosa Linares y a su hermano Carlos Linares. Por cierto, en la década de los años sesenta, un jovencito árabe sorprende a los apureños como maraquero y cantante, es Jorge Ibrahim, con un programa de música llanera. También hacía vida artística en esa emisora, Luis Pérez, apodado Mataguaro, quien orgulloso exhibía su característico bucle o copete a lo Elvis Presley, peinado con un aceite para el cabello conocido como Glostora. Por cierto, Mataguaro, interpretaba rancheras al estilo de Jorge Negrete, con los temas Allá en el Rancho Grande, El Jinete y México lindo y querido; también interpretó canciones de Pedro Infante y Miguel Aceves Mejía; asimismo actuaron en esa emisora Armando Narváez con las canciones del Indio Araucano y lucho Gatica; Pedro Masara con canciones de Panchito Riset. Otros artistas fueron Fernando Farfán, el popular Tocino, interpretando Granada, Violetas Imperiales, al estilo de Alfredo Sadel, Evelio Hernández hermano de Nelson Caboluis Hernández, emulando a Bienvenido Granda y Daniel Santos; Rafael Verenzuela quien debutó con el bolero que popularizara Pedro Infante, Serenata sin luna y El Aventurero; otro interprete era Tito Sulbarán, con canciones de Benny Moré y Tony Camargo, conocido por el tema Año viejo; Oscar Álvarez con el bolero Te odio y te quiero , popularizado por el Indio Araucano y Omar Ojeda, apodado El Taxista, interpretando canciones interpretadas por Leo Marino, Daniel Santos y Carlos Argentino.

También La Voz de Apure, transmitía el reconocido programa infantil Los Pitoquitos. Por cierto, éste era otro popular programa icono de la parrilla de La Voz de Apure, que catapultó a una generación de artistas apureños, que hoy gozan de reconocida fama en radio y televisión; entre los que descuellan: Orlando Rivero El Caballero de la canción, quien el año 1981, ganara el Florentino de Oro; Wilfredo Rivero, Yaro, quien impactó en la década de los años setenta; el fallecido Pedro Gamarra con el vals Conticinio; Cristina Maica; Esmeralda Verenzuela descollando con el tema La Potranca Zaina; Nancy Linares, apodada La Garcita Blanca; Yarisma Aparicio; Ángel Bolívar conocido como El Ángel de la canción, con el tema Madrecita querida, quién el día de las madres hacia jipear (llorar a moco suelto) a muchas madres. Por cierto, Los Pitoquitos, catapultó a la fama nacional e internacional a casi todos los que participaron en ese espacio.

B. La función social de La Voz de Apure
Se hace necesario destacar en este ensayo el papel social que desde su creación (1 de enero de 1948), hasta su cierre definitivo (año 2017), desempeñó este medio de comunicación no solo en el Estado Apure, sino en los Estados vecinos. Entonces, no existía la televisión por cable ni satelital, la Internet ni la telefonía móvil celular, lo que significaba que los sanfernandinos y su hinterland, es decir, el interior del Estado Apure y los habitantes del sur del Guárico, Barinas y Norte del Territorio Federal Amazonas (hoy Estado Amazonas) pasaban la mar negra, por cuanto, estaban incomunicados. Ante esa dramática realidad, los directivos de la emisora La Voz de Apure, acertadamente, optaron por crear un espacio que rompiera esa barrera comunicacional y por cierto, se logró con bastante éxito. En ese sentido, la emisora transmitía diariamente (tres veces al día), mensajes de interés para los habitantes del medio rural, quienes ante la falta de energía eléctrica acudían al recurso que brindaban los coloquialmente llamados radiecitos de pilas (radiorreceptores que funcionaban con baterías de 1,5 voltios). A las siete de la mañana, una de la tarde y siete de la noche, la gente del campo encendía su radiecito de pilas, únicamente para escuchar muy atentos, mensajes como: Al compadre Joseíto, allá en Paso Arauca, de parte de Cabeza loca, que me tenga los gallos que este jueves los voy a buscar pa´ échalos a pelear en Uverito; A José del Carmen Mirabal, en San Rafael de Atamaica que ya Josefina dio a luz un niño; que están bien, que la venga a buscar y que traiga plata; A Carmelito, en Arichuna, le informa su compadre Marcelo Tovar, El Chingo, que traiga el algodón que ya lo negoció a buen precio; A Maritza Pérez en Guayabal que esperé con las cachapas a su comadre Josefina pa´ celebrar su cumpleaños; A Yadira Rangel que se venga pa´ San Fernando que este sábado Juanita Camacho va a celebrar su cumpleaños y que no se olvide traerle el maute que le ofreció.

Esos eran algunos de los mensajes que los interesados hacían llegar a los radioyentes de la Voz de Apure. Lamentablemente la señal de este pionero e importante medio de comunicación apureño se ha apagado; por cierto, la última transmisión se hizo desde sus magníficas instalaciones de la Avenida Miranda (ver imágenes), hace aproximadamente seis años. Desde entonces los apureños evocan con tristeza sus programas y sus efectivos mensajes; asimismo recuerdan las exposiciones iconográficas que en el lobby realizaban anualmente los cronistas apureños Edgard Decanio y Rafael Verenzuela, quienes con sus emblemáticas y viejas fotografías resaltaban las principales actividades económicas, culturales, políticas que se efectuaban en San Fernando y sobre todo, daban a conocer el valioso patrimonio cultural edificado y natural desaparecido.

CONCLUSIÓN:
En el año 1959 la empresa dejó de ser Compañía Anónima y dejó de llamarse La Voz de Apure para denominarse Radiodifusora La Voz de Apure, quedando como una firma personal. En una primera etapa (1948-1962) transmitió en Onda Corta, en la Banda de 49 metros. Por cierto, esta emisora disponía de magníficas instalaciones tanto en la sede donde nació (Calle 19 de abril) frente al Puerto El Tamarindo, como en su última residencia (propiedad de la emisora), ubicada en la Avenida Miranda, desde donde transmitía en Amplitud Modulada (AM), en frecuencia de 1220, como lo hizo desde un primero de enero del año 1948, hace setenta y un años.
Hoy, lamentablemente esta emisora ya no está con sus animadores, presentadores, locutores, cantantes, sus programas bandera Los Pitoquitos, La Hora de los aficionados, El Programa Especial, Taguarí, El Gigante sin forma, conducido por Yaro, De domingo a domingo, conducido y animado por el Trovador de la voz romántica, Don Félix Marchena y sobre todo el espacio de los mensajes, que tres veces al día unía diariamente a los llaneros.
Me atrevo a conjeturar y a lo mejor no estoy pelao (pelado), que lamentablemente las causas de la salida del aire de este pionero y necesario medio, se debieron, ante todo al impago de deudas por parte de algunos de sus clientes; asimismo a la presencia de la apabullante televisión por cable o satelital, la INTERNET y la telefonía móvil celular.
En ese sentido, este ensayo se ha hecho, no solo para recordar el papel que desempeñó un útil y necesario medio de comunicación social apureño como fue LA VOZ DE APURE, sino también como un aporte al conocimiento de la historia de la radiodifusión en la entidad, es decir, de utilidad a los docentes y estudiantes de comunicación social en Apure y sobre todo para que en el futuro nunca jamás, sea por re o por fa, que los apureños consientan pasivamente se vuelva a cerrar en Apure ningún medio de comunicación social.

FUENTES:

Hemerográficas:
VERENZUELA H., Rafael J. Remembranzas y glorias deportivas. La Voz de Apure, 60
Aniversario, Diario ABC. 28-12-2007
VISION APUREÑA Edición Aniversario, Año II, Numero 749, San Fernando,
24 de noviembre de 2006.