En los últimos meses de 1917, Don Fabián Michelangelli le había vendido a Don José Salerno su importante hato Puerto Miranda, frente a San Fernando, río Apure por medio, esto había que celebrarlo y Don José obtuvo prestada la lancha "Roma", de mucha capacidad, con Don Félix Barbarito.
El
domingo 25 de Noviembre de 1917, muy temprano cruzaron el imponente río. Allá
estuvieron disfrutando del río, comiendo carne asada y los mayores libando
bebidas espirituosas en animado palique, corrían días de bonanza en Apure.
Entre 3 y 4 de la tarde se dispuso el regreso.
Varias embarcaciones volvieron a cruzar
el Apure, la lancha "Roma" fue abordada por
unas 22 personas
entre quienes figuraban
Don José Salerno
algo pasado
de tragos y calzando gruesas y pesadas botas; sus tres menores hijos , María Josefa, María Antonia y Trina Salerno Melo; la criada de la familia, oriunda
de Calabozo, Julio
Cáspers, y su hija Ni na; Esperanza
Arreaza de Rengel, su hija Esperanza Rengel Arreaza;
la señora esposa del general
Sinforoso de Armas, su hija y una sobrina; las hermanas Encinozo, Petra de Cáspers y sus hijas; una hija de Julio Domínguez. La tripulación
estaba integrada por el motorista Vicente
Golias y el timonel Ramón García.
Cuando cruzaban
la mitad del río, frente
al Picacho del remoli no. el
motorista Golias dio un viraje violento y la embarcación naufrago; muchos lograron ponerse a salvo, a nado o ayudados por embarcaciones de Don Félix Fernández, en su lancha "El
Sultán" y otras que volaron al lugar; sin embargo la corriente arrastró
a Don José Salerno, que a pesar de ser buen nadador,
tenía unos cuantos tragos
encima y sus tres hijas lo abrazaron; perecieron, además de los cuatro
Salerno y su criada, Emilia Arreaza Rengel, distinguida señora oriunda de Ciudad Bolívar y con tres años de residencia en la capital apureña; su hija Esperanza y Julio Cáspers y su hija Nina. Una incesante búsqueda se emprendió hasta horas de la noche; desde la orilla,
el propio Presidente del Estado, General de Brigada
Vicencio Pérez Soto, dirigía las operaciones de búsqueda que resultaron infructuosas.
Unos fueron localizados de inmediato y el 27, martes, se consiguieron los cadáveres de María Antonia
Salerno, Esperanza Rengel Arreaza y Nina Cáspers, que debieron ser inhumadas de inmediato. Posteriormente, en el sitio de La Rompía,
más debajo de San Fernando apareció el cuerpo de Don José Salerno aun
abrazado a sus dos hijas.
La tragedia
conmovió al pequeño pueblo que era San Fernando, por la notoriedad de las víctimas. La primera información la transmitió a el Nuevo
Diario,
periódico
oficialista, un pariente de la señora Rengel, Saturnino
Arreaza,
por vía telegráfica. Al día
siguiente
la destacaba en primera página el mismo periódico, en toda su
magnitud y con precisión de detalles. La información recorrió
todo el país y el 11 de diciembre
siguiente la reproducía el Impulso de Barquisimeto.
La tragedia
abatida sobre los Salerno trastornó
a la señora Diomede Melo, la viuda de Don José. Habían quedado cuatro
niños huérfanos. Pipo, Octavia, Juan y Luisa Salerno
Melo. Afortunadamente, al tiempo recobró la salud mental Doña Diomede,
quien falleció a avanzada edad en Caracas.
Sin embargo, eso marcó a la familia,
que debió partir a Caracas bajo el amparo de un hermano de ella.
Esta ha sido una de las tragedias más recordadas por l os viejos sanfernandinos.
La lancha "Roma" aparcada en el Puerto Guzmán Blanco, hoy en día Puerto Miranda.
Fuentes:
El Nuevo Diario. Caracas 27 de noviembre de 1917, 1764. p. 7.
El Nuevo Diario. Caracas 28 de noviembre de 1917, 1765.
p. I.
El Impulso.
Barquisimeto 11 de noviembre de 1917. 3619.
Letras. San Femando de Apure. 8 de diciembre
de 1932. 922. p.2 lnfom1ación
de Doña Luisa Salerno Melo de González (Agosto de 1987).
Fuente:
REPUNTES III HISTORIALES SAN FERNANDINOS
Fundación Historica Cultural Dr. Italo Francisco Decanio D´amico
Colección Fotografica “EL SAN FERNANDO DE AYER”
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