EL ANCESTRAL SECTOR CASA DE ZINC

Hugo Arana Páez HARPA

… “Difícil escribir. Fácil leer”…

INTRODUCCIÓN:
Observando el cuadro Casa de Zinc, pintado por José Manuel Fuentes, me motivó a referirme en la serie IMAGEN E IDENTIDAD al ancestral, populoso y céntrico sector de San Fernando conocido como CASA DE ZINC; en ese sentido felicito a los artistas plásticos, quienes con su arte han contribuido a la reconstrucción histórica de la capital del llano venezolano.
En este ensayo reseñaré quién fue el constructor de esa casona; también me referiré a la evolución de sus calles, barrios, las familias fundadoras que han hecho vida en el sector y también se resaltaran hechos relevantes como la instalación del primer semáforo en la ciudad; asimismo del frustrado intento de la toma de la casa de gobierno (El Palacio Fonsequero) el 20 de mayo del año 1922, acaudillado por el general trujillano Waldino Arriaga, de quien se dice planificó esa acción en Casa de zinc; asimismo, se hará referencia a las repercusiones que tuvo en ese sector, ese estallido social acaecido el 27 de febrero del año 1989 conocido como El Caracazo.
1. ¿Qué era y en dónde estaba Casa de Zinc?
La Casa de Zinc nació a la salida del pueblo hacia el oeste, donde en el año 1930, existían muchos potreros y en el invierno el agua corría libre por sus alrededores, facilitando la navegación de bongos y canoas atestadas de productos del campo que acudían al lugar a ofertarlos al mejor postor. Con el transcurrir del tiempo el alarife, José Morillo se estableció con su alfarería (fabricaba tejas y ladrillos) y posteriormente, muchas familias, que fueron pioneras como los Domínguez, Tovar, Herrera, Sevilla, y Carmona también se establecieron en el lugar. Fue el comerciante libanés Chara Latuff, quien con su inmensa y rara casona de láminas de zinc acanalado y galvanizado quien le dio vida a la zona, a la que el pueblo coloquialmente y con justificada razón la bautizó Casa de Zinc. Hoy todo ese sector de San Fernando, se conoce con ese nombre.
2. ¿Quién era Chara Latuff?
Era un libanés quien a la edad de catorce años se vino del Medio Oriente a residenciarse en tierras llaneras, donde se casó y de ese matrimonio nacieron sus seis hijos: Yunis, Abelardo, María Luisa, Charita, Adalberto y Lisandro, quien fue Ministro de Sanidad y Asistencia Social, siendo Presidente de la Republica Carlos Andrés Pérez.
3. ¿Quiénes se reunían en la década de los años treinta en Casa de Zinc?
En los años treinta del siglo veinte, se reunían en esa casona sus amigos, entre los que destacaban artistas, músicos, poetas, humoristas y personajes populares. Esos tercios se congregaban en casa de Musiú Chara, para cantar, tocar algún instrumento, jugar sus partidas de dominó, barajas y sobre todo a saborear los suculentos sancochos de gallina y por supuesto echarse sus palitos. Allí concurrían: Juan Porrello, los Bezara, Chagín Buaiz, Don José Rujana, Pipo Salerno, Juan Salerno, los Sanoja, Rafael Marín, Pancho Serrano, Antonio Sumí, Reinaldo Fernández (padre), los hermanos José y Andrés Ochoa, José Silva, Jesús Martínez (Paragüito), Luis Melo Olavarría, Genaro y Orestes Felice, José María Mejías, Bonifacio Blanco, Cristóbal Colón, Francisco Ruiz, Anselmo Aguín, Atanasio, Chaguarapo y otros amigos del simpático Musiú Chara.
4. ¿Qué se mercadeaba en Casa de zinc?
Chara era un hombre muy apreciado por los sanfernandinos, al que casi todos los campesinos le vendían sus frutos. En su negocio los apureños encontraban desde estiércol o sacos de guácima seca (para preparar la conocida bebida a base de aguardiente y guácima), hasta el más sofisticado artículo. En Casa de Zinc, morían todos, decía sonriente Musiú Chara, por cuanto ese negocio estaba ubicado estratégicamente (entrada y salida del pueblo). Los campesinos que traían sus productos para venderlos en San Fernando, la mayoría de las veces se los vendían a Chara Latuff y a la vez el musiú, los abastecía de todo y se regresaban cargados y felices a sus lugares de origen sin tener que entrar al pueblo. Asi se escuchaba decir, en muchas ocasiones a sus clientes Para qué voy a entrar a San Fernando, si ya Chara me apertrechó de lo que necesitaba y en verdad así ocurría la mayoría de las veces.
5. El General Waldino Arriaga y la Casa de Zinc.
Según escribía Pedro Laprea Sifontes (El Cronista lugareño) que en ese lugar, el General Waldino Arriaga, pensó apresar al Presidente del Estado Apure (para esa época, 20 de mayo de 1922) el doctor y General Hernán Febres Cordero, a quien apodaban Cara e´ gallina, por cuanto, era muy flaco y de cara muy fina. El caso es que Arriaga discutió en Biruaca la estrategia del combate, con su lugarteniente el General Parra Pacheco, quien propuso entrar a San Fernando en horas de la noche, echar unos tiros para anunciar a los comprometidos del pueblo el inicio de esa intentona; pero Arriaga porfió y le dijo a Parra Pacheco que él tiraba la parada a las doce del día en Casa de Zinc; por cuanto, Febres Cordero a esa hora como lo hacía todos los días, iría a esa casona. Desafortunadamente, ese día el hombre no asistió a Casa de zinc y Arriaga, tuvo que cambiar los planes, es decir, marchar por El Cañito a tomar el Palacio de Gobierno o Palacio Fonsequero (ubicado en el centro de la ciudad, entre las calles Bolívar, Sucre, Fonseca y Peñaloza, frente a la actual tienda por departamentos Seven´s). Por cierto, Arriaga, antes de emprender la jornada, arengó a la tropa, con estas palabras ¡Quién no tenga miedo que dé un paso al frente! Enseguida cien aguerridos llaneros dieron un paso al frente, acompañando al testarudo y valiente Arriaga. Lamentablemente esta tentativa fracasó y casi todos fallecieron en el intento y el resto fue liquidado en la desbandada. Mientras que Parra Pacheco se fue a la Casa de Zinc y desde allí oyó la corneta de los revolucionarios tocando a retirada. De inmediato dispuso su tropa y se replegó sin disparar un solo tiro; abandonando a Arriaga, quien mortalmente expiraba frente a la casa de Don Pancho Echenique (una vivienda de dos aguas, ubicada en la calle Bolívar, frente al Colegio La Sagrada Familia), posiblemente buscando auxilio en el antiguo Hospital de la Caridad, que estaba ubicado dos cuadras más adelante. Pasados esos acontecimientos, la Casa de Zinc continuó su habitual ritmo con Chara y su hijo Raúl Herrera, el popular negro Nass (Higinio Osto, criado de Chara) y Pedro Gil; barbero, sombrerero, gallero y arpista quien de vez en cuando animaba las tertulias templándole las cuerdas a su camoruca en el viejo caserón.

6. Alcabala en Casa de Zinc
La alcabala estaba donde ahora se halla el semáforo; exactamente en el cruce de cuatro avenidas (Miranda, Revolución, Carabobo y Los Centauros). Hasta mediados del siglo veinte no existían en San Fernando avenidas y en el caso específico de Casa de Zinc, estas avenidas anteriormente eran unos callejones de tierra por donde se desplazaban los visitantes, vecinos y las puntas de ganado rumbo a Puerto Miranda.
7. Barrios en el Sector Casa de Zinc
7.1. Callejón Las Tejerías
Siendo Presidente de la Republica el General Marcos Pérez Jiménez, las familias Rodríguez y Flores deciden fundar en el sector, un barrio con el nombre Callejón Las Tejerías, por cuanto en esa calleja estaba la fábrica de tejas y ladrillos de José Morillo, quien producía esos insumos para la construcción de las viejas casonas del pueblo. Por cierto, frente a esa alfarería había un estacionamiento donde la Dirección de Obras Públicas del Estado Apure guardaba sus vehículos.
7.2. La Cauchera
A la caída del dictador Marcos Pérez Jiménez, el 23 de enero de 1958, se funda el barrio La Cauchera; toma su nombre de un pequeño negocio que funcionaba allí, dedicado a la reparación de cauchos; cuyo propietario se llamaba Mateo. Los fundadores fueron las familias: Aparicio, Fuentes, Serrano y Tovar, entre otras.
7.3. La Calle Andrea Santamaría
Esta calle se crea en el año 1960, siendo sus fundadores las familias: Belisario, Gutiérrez, Montilla y Matute, entre otras. Por cierto, comienza desde la calle Rodríguez Rincones hasta la Avenida María Nieves. Inicialmente fue un callejón de tierra que los vecinos crearon, para evitar la incomodidad de pasar por la alcabala, donde rutinariamente las autoridades solicitaban credenciales a los transeúntes, en ese sentido, para evitar algún inconveniente, vadeaban la alcabala por esa trocha que después se convertiría en la Calle Andrea Santamaría.
8. La expansión del sector Casa de Zinc a partir de la década de los años setenta.
Cuando desaparece la vieja casona que proveía de alimentos a los vecinos del sector. Se instala a principios de los años setenta un mercadito de frutas y vituallas. Después otros pequeños negocios dedicados en las noches a la venta de parrillas y pescado frito. Para el año 1976 el cronista de la ciudad Julio César Sánchez Olivo, avizoraba que ese sector sería el centro de las actividades económicas de la ciudad y no se peló el viejo. Hoy Casa de zinc, está ubicado en el cruce de cuatro importantes avenidas, donde son muchísimos los vehículos y personas que convergen en ésa zona; amén de los viajeros que vienen y van de y a las poblaciones del interior del Estado. Los primeros negocios que se instalaron a partir de ese año fueron: Tiendas como La Gran Parada, bares como La Encrucijada. Hasta finales de la década de los años ochenta, según testimonio del señor Antonio Campos vecino del sector, funcionaba en donde ahora están los negocios Todofertas y Llano Telas, numerosos tarantines dedicados al expendio de fritangas (pescado frito, pollo frito y horneado, parrillas, empanadas y arepas). También en el año 1991 se instala en el sector, hacia la Avenida Los Centauros, una tienda de ropa perteneciente a la cadena de tiendas Almacenes Pepeganga. En el área educativa, se halla la Escuela Daniel Florencio O´Leary y la sede de la Zona Educativa del Estado Apure; en el área de salud se halla en la esquina (exactamente donde estaba la vieja Casa de zinc) una farmacia y por la Avenida Resolución un centro dispensador de salud, llamado Clínica del Sur.
8. El Caracazo y el sector Casa de Zinc. Motivado al inconsulto incremento de los precios de la gasolina el 27 de febrero del año 1989, se produce el estallido social llamado coloquialmente El caracazo. Comenzó ésta efervescencia social en la población de Guarenas, extendiéndose a Caracas y a otras importantes ciudades del país. Aquí en San Fernando, fue el sector Casa de Zinc, donde se puso de manifiesto este evento; caracterizado por la protesta de una turba enardecida. Es decir una poblada furiosa que saqueó muchos de los negocios ya mencionados.

8. ¿Cuándo se instaló el semáforo en Casa de Zinc?
El semáforo de Casa de Zinc se instaló en el año 1991. Era una necesidad urgente controlar la anarquía que representaba a toda hora el numeroso tráfico de vehículos; el cual colapsaba las demás vías de la ciudad y es que este sector es la encrucijada donde convergen cuatro importantes avenidas (Miranda, Revolución, Carabobo y Los Centauros). Por cierto, desconozco si éste fue el primer semáforo que se inauguró en la ciudad.

CONCLUSIÓN:
Hoy ya no está musiú Chara, ni su casona de zinc. Ese libanés que llegó a San Fernando a la edad de catorce años; se sembró en esta tierra junto con su Casa de zinc, la cual por extensión le ha dado el nombre a ese importante sector DE San Fernando, comprendido entre las Avenidas Revolución, Caracas, Los Centauros y Callejón Las Tejerías, del que sus vecinos se sienten orgullosos; por cuanto, representa sus valores de identidad y pertenencia.
Seguramente el cuadro pintado por el artista plástico José Manuel Fuentes, que motivo este ensayo de hoy, fue elaborado a partir de una desteñida y vieja fotografía de la época, donde se observa a la izquierda una casona de zinc, donde unos parroquianos hacen vida en el lugar; asimismo una calle de tierra (actual Avenida Los Centauros que va desde Casa de Zinc hasta el Parque de Ferias) y a la derecha un jinete con su sombrero pelo e´ guama a caballo. También a ambos lados de la calle, se observan hermosas viviendas de dos aguas (propias de la época) y al final en el centro un hermoso samán, seguramente será el célebre Samán llorón, icono de la ciudad, el cual el año 1988, con motivo de la celebración del bicentenario de la capital del llano venezolano, las autoridades de entonces, para dar paso a la Avenida Los Centauros, irresponsablemente lo echaron abajo.
Hoy no tenemos a la ancestral casona de zinc ni al viejo samán pero nos queda su recuerdo en el corazón y su imagen en un cuadro.

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