Por Orlando
Nieves.
En un
invierno cubierto de bendiciones, con olor a tierra mojada y una sabana
cubierta de un majestuoso verdor, Apure recibe a su hijo Norman Arnoldo Zarate
Gamarra un 22 de Mayo de 1962. Así describe la pluma del poeta Williams Zerpa a uno de los
máximos exponentes de nuestra música llanera. Norman es hijo de Miguel Antonio
Zarate y Cruz Alejandra Gamarra de Zarate, de quienes recibió amor, educación y
valores. Desde muy pequeño muestra profunda pasión por la música participando
en conjuntos de aguinaldos, corales y orfeones donde pasa a ser uno de los
tenores de mayor relevancia y registro musical.
Se
destacó como solista del grupo de música tropical bailable Marort, así
mismo, su voz se escuchó en innumerables fiestas al lado de Los Juniors. Sin
embargo, no dejaba a un lado la música llanera. El arpa, el cuatro y las
maracas estaban metidos profundamente en su ser, lo que le permitió demostrar
que era una novel promesa del canto recio. Ha obtenido numerosos premios
nacionales e internacionales, entre ellos, “La Panoja de Oro” donde conoce al
maestro Hugo Blanco, quien le propone una audición en su estudio de grabación y
de allí pasa a formar parte del elenco de artistas de Producciones HB, al lado
de Reina Lucero, Maritza Marchena, Cristina Maica, Juan Bautista, Iris Gavidia,
entre otros.
Algunos de
sus temas más sonados son: Mi lindo Llano Apureño, La Sangre de Venezuela y
Viejo Fogón Sabanero, siendo este último, el tema más apoyado y solicitado en
las radios de Venezuela y Colombia, tanto así, que a este gran cantante de
nuestra música, en el Llano, lo llamamos “VIEJO FOGÓN SABANERO”. Llega el éxito
y sigue siendo un hombre sencillo, de respeto con profunda ética y valores
hacia el público y sus seres queridos.
Norman se
aleja de los escenarios y hace una pausa en su carrera por motivos de salud
mientras se recuperaba. Gracias a Dios regresa con amplia madurez profesional y
con mayor pasión, presentando su producción discográfica, “Criollo, Romántico y
Recio”, recibiendo la aceptación y apoyo del Público Venezolano, reafirmando su
versatilidad, talento y su excelente calidad de interpretación manteniendo la
calidad vocal y las cualidades que lo llevaron al éxito. Hoy al lado de su
esposa, Carmen Olinda y de sus hijos: Arnoldo José, Taidimar Olinda, Norman
Arnoldo y Carlos Roberto, Norman es un hombre arraigado a su familia, a sus
principios y valores.
“El Folclore Sabanero se viste de fiesta al
tener nuevamente y con un Nuevo disco repleto de Costumbres, historias,
sentimientos, pasión y una marcada calidad y maestría a Norman Zarate, huella
indeleble y ejemplo para las nuevas generaciones”.
Williams
Zerpa
0 comentarios:
Publicar un comentario